Akkord - Akkord

8.4
(Houndstooth)
Techno, Electrónica

La ciudad de Manchester es una ciudad con un pasado musical bastante extenso, el cual se puede respirar en su ambiente cuando uno la visita. No solo cuenta con una variedad increíble de tiendas musicales donde uno puede encontrar discos que pensó nunca ver en su vida, sino que alberga también una cantidad muy importante de clubes que parecen estar situados en la vanguardia de la música electrónica, simultaneamente quizás con otras ciudades europeas como Berlín o estadounidenses como Detroit.

    Aunque curiosamente la corriente que más obvia y concretamente surgió de dicha región inglesa fue el Madchester (caracterizado por sus relajados ritmos y su onda psicodélica), la música de tradición mancuniana es preferentemente industrial y además oscura. Esto se debe a que la misma Manchester es una ciudad eminentemente industrial, además de que en los años de la post-guerra y hasta mediados de los 80's solían catalogarla como un lugar sombrío.

   Por todo lo anterior, no sorprende que dicha ciudad sea una de las más importantes exportadoras de Techno que existen alrededor del mundo, un genero que se caracteriza por ser el más experimental y oscuro de todo el mundo de la electrónica, además de ser el que se encuentra en la más grande expansión debido a su falta de ataduras. El más poderoso representante del Techno de dicha región probablemente sea Andy Stott con discos como Luxury Problems del año pasado, que llamó bastante la atención en el medio.

   Por su parte, Akkron es un proyecto de Manchester que presenta un Techno muy atractivo, puesto que no solo se limita a hacer música de objeto, ni lo que vendría siendo básicamente drone, como The Haxan Cloak por ejemplo, sino que también presenta cierta cantidad de temas bailables, por supuesto sumamente extraños, pero bailables. Dicha falta de experimentación absoluta no es para nada demeritable puesto que parece encumbrar un sonido que durante algunos años se mantuvo en un pedestal poco accesibles.

   Akkron, su disco debut y homónimo, es uno de los mejores lanzamientos de electrónica del año, ya que la unión entre Synkro e Indigo, los dos colaboradores de la agrupación, lleva al duo a un territorio que definitivamente no es el de su zona de confort, y que sin embargo explota lo mejor de ambas partes.

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